Para garantizar que el chapado en oro no se dañe aconsejamos no exponer las joyas diariamente al agua, perfumes, alcohol u otras sustancias. Si se expone a cualquiera de los anteriores, el chapado en oro, con el tiempo, se desvanecerá y se volverá plateado. Se recomienda evitar los golpes fuertes, ya que no debemos olvidar que las gemas tienen una reacción al impacto similar al vidrio. Es extremadamente frágil. Es resistente, pero se aconseja mantener un extremo cuidado con las caídas y los golpes. Para más información consulte nuestro apartado de Cuidados.